Graciela Iturbide: La muerte, el indigenismo y los pájaros

 

Graciela Iturbide es una fotógrafa mexicana nacida en 1942. Es bastante reconocida por sus grandes secuencias fotográficas que, en el proceso de captura, pueden durar incluso hasta 8 o 10 años en terminarse. Los principales temas que ha fotografiado son el paisajismo, el indigenismo y la muerte. Es ganadora de premios como el Hasselblad, premio de fotografía de origen sueco, y becaria de la Fundación Guggenheim, quienes apoyan el arte y la creatividad profesional.

Ella se casó a la edad de 20 años, sin embargo, en 1969, quien para ese entonces ya era no solo esposa sino madre, decide estudiar guionismo en el Centro Universitario de Estudios Cinematográficos de la Universidad Autónoma de México con el sueño de convertirse en directora de cine.

Dentro de su estancia como alumna de la UNAM, conoce al gran Manuel Álvarez Bravo, quien era su maestro y además era fotógrafo. Sus obras eran enfocadas a un México posrevolucionario influenciado por el muralismo y el “renacimiento mexicano”. Para ese entonces, Álvarez era elogiado y admirado en el extranjero, pero en México, quien en aquella época no se le daba tanta importancia a la fotografía, no era la gran cosa dentro del país. Al conocer a dicho artista, Iturbide decide dejar el guionismo y busca ser discípula de Álvarez como fotógrafa durante un año.

En su carrera profesional, en los 70’ viaja en gran parte a Latinoamérica. Fotografía la población indígena en 1978 para el Archivo Etnográfico del Instituto Nacional Indigenista de México. En el 79, junto con Francisco Toledo, fotografían la cultura zapoteca (donde revelan las imágenes hasta 1989). Llega a trabajar en varios países no solo de América sino de Europa y recibe grandiosos premios como el Eugene Smith Memorial Foundation, el Grand Prize Mois de la Photo, la beca "la Guggenheim Fellowship por el proyecto ‘Fiesta y Muerte’, el Doctor honoris causa en Fotografía por el Columbia College Chicago", entre muchos más.

 

Dentro de la fotografía, Iturbide tiene cuatro temas por los que se le puede identificar. El primero, la muerte prematura, cuando fallece su hija en 1970 y se obsesiona a tal grado, que sus fotografías son de cementerios o de lugares similares a la muerte. La segunda, que es indigenista, donde captura retratos de personas del pueblo Seri en Sonora y el matriarcado en Juchitán, Oaxaca. La tercera, la fotografía internacional, donde hace una introspección de ella y quita a las personas del encuadre, haciendo que en sus fotos se sienta la soledad. Y por último, los pájaros, quien para ella representan un renacer, la libertad y autonomía.

¿Qué te parecen sus obras?